El instituto de ciencias de la educación Jean-Jacques Rousseau en Ginebra, Suiza, fue fundado por Édouard Claparède
en 1912 y estableció el inicio de un cambio pedagógico con la finalidad
de proyectar hasta el resto del mundo. Asimismo, en comparación con
otros institutos de formación de maestros, sus
objetivos desde el comienzo fueron propios: Mejorar
la formación psicopedagógica del magisterio, contribuir al progreso y
desarrollo de la pedagogía científica y lograr un mejor conocimiento del
niño.
El filosofo y pedagogo Pierre Bovet amigo de Claparède fue nombrado primer director del instituto. de igual manera, se unieron contribuyeron médicos, psicólogos, pedagogos, psicoanalistas con ideas innovadoras similares a las que plantea el instituto. Dentro del grupo inicial destaca la presencia de Adolphe Ferrière entusiasta promotor de ideas destinadas a la organización e intercambio científico entre las ya numerosas y conocidas Escuelas Nuevas.
El filosofo y pedagogo Pierre Bovet amigo de Claparède fue nombrado primer director del instituto. de igual manera, se unieron contribuyeron médicos, psicólogos, pedagogos, psicoanalistas con ideas innovadoras similares a las que plantea el instituto. Dentro del grupo inicial destaca la presencia de Adolphe Ferrière entusiasta promotor de ideas destinadas a la organización e intercambio científico entre las ya numerosas y conocidas Escuelas Nuevas.
Durante los primeros años del Instituto Jean-Jacques Rousseau, se componía de una
estructura simple dentro de la cual desarrollaban estudios psicopedagógico, formación de
educadores y una escuela anexa, la Maison des Petits, de niños entre tres y diez años,
de cuya dirección se encargaron dos maestros, Louise Lafendel, Mina Audemars.
(Instituto Jean-Jacques Rousseau, Promoción del curso 1918-1919)
En la
celebración de Calais, se efectúa el I Congreso Internacional de la
Nueva Educación en 1921, lo que conlleva a la evidente interpretación de
los ginebrinos en el Congreso de Calais, donde se establecen los
fundamentos primordiales para la creación de la Liga Internacional para
la Nueva Educación. compuesto por renovadores de diversos países.
Seguidamente, a los años anteriores de la segunda guerra mundial, se
realiza un relevo generacional en la Escuela de Ginebra, dando así el
protagonismo a un equipo mas joven (Jean Piaget, Margarite Lousti-Uteri y Robert Dottrens). para así mantener la presencia y afianzamiento definitivo del Instituto Jean-Jacques Rousseau en
la Universidad de Ginebra como Facultad de Psicología y Ciencia de la
Educación. Igualmente, en la Oficina Internacional de Educación como
departamento autónomo en la Unesco.
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